Los Apagadores de Sueños
¿Alguna vez alguien, al contarle tus sueños te ha dicho que mejor no lo hagas, no vale la pena, quizás eso no es para ti?
Te voy a contar mi historia:
Hace unos años quería irme a estudiar la carrera al extranjero, pero había un pequeño detalle, estudiar en Europa estaba un poco fuera de mi presupuesto y del de mis papás en aquel momento y no había terminado preparatoria con un promedio suficientemente alto para aplicar a una beca. Sin embargo yo me había empeñado en hacerlo.En el momento que dije eso, muchas personas saltaron y me dijeron que eso no iba a ser posible, que mejor me quedara en México, que era mucho más sencillo ya que no tenía que viajar y más barato, que eso definitivamente no era para mí.
Muy pocas personas me dijeron, te apoyamos decidas lo que decidas, si ese es tu sueño, síguelo.En ese momento no me podía ir por falta de recursos, por eso me metí a trabajar, amaba mi trabajo, me divertía demasiado haciéndolo y encima me pagaban, según yo iba a trabajar por 1 año para que mi situación mejorara y así poderme ir, pero no sé en qué momento ya habían pasado 3 años.
En esos 3 años mucha gente me dijo que dejara de querer irme fuera, que ya me quedara en México a estudiar, ya “había perdido” 3 años y no había hecho nada, es curioso que solo estas pocas personas que me apoyaban desde el principio eran las mismas pocas personas que me seguían apoyando.
¿Cómo fue que pasaron 3 años? Erróneamente empecé a escuchar más a la gente que me decía que mejor me quedara en México, en lugar de los que me decían que siguiera mis sueños, y empecé a sabotearme, al principio diario buscaba universidades fuera de México, después del 2° año deje de hacerlo y decía que algún día lo haría pero en el momento era imposible, aunque incluso había dejado de buscar la forma.Fue hasta un día casi a los 3 años cuando estando en una capacitación, llegó el facilitador del curso y me dijo que tenía mucho futuro en esos temas, sin embargo necesitaba una carrera para poder avanzar, sino no iba a crecer en el ramo.
Fue en ese momento en el que recordé que era justo lo que quería y había dejado de escuchar las voces de quienes me apoyaban, cosa que volví a hacer inmediatamente y a mediados de ese año me fui a estudiar la carrera a las Islas Canarias, una de las mejores experiencias de mi vida.
Es muy común que al empezar a soñar o plantear metas en tu vida, haya gente que te diga que mejor ni lo intentes, que no vale la pena el esfuerzo o incluso que eso no es para ti, que mejor hagas otra cosa más sencilla. Estos apagadores de sueños llegan a rodear tu vida y puede llegar el momento en el que les crees tanto que estás dispuesto a abandonar lo que quieres ya que ellos no creen que puedas.
En mi caso, mis familiares cercanos fueron quienes sí querían que me fuera aunque sí hubo un familiar y muchos amigos que con tal de que yo no me frustara me repitieron una y otra vez que mejor me quedara en la ciudad.
Ahora ¿Qué sucede con estos apagadores de sueños?
Generalmente es gente que te quiere, que se preocupa por ti y cuando les cuentas lo que quieres hacer no quieren ver que te lastimes o que fracases y con la mejor intención, aunque de una mala forma te dicen que “mejor no lo hagas” ya que no quieren verte sufrir. En la mayoría de los casos no se dan cuenta que de lo que te están queriendo proteger es de lo que ellos se quieren proteger, de lo que ellos tienen miedo de hacer y sienten que si tú lo haces te vas a alejar (todo esto funciona a niveles subconscientes y por eso en ocasiones no se dan cuenta).
También puede disparase alguna envidia al verte crecer a través de tus metas (pues a los humanos, en algún momento, nos duela ver lo que nosotros no hemos alcanzado al ver a alguien que lucha por alcanzar sus metas) y eso hace que empiecen a decirte que mejor no lo hagas, haciéndote sentir que realmente se están preocupando por ti, cuando por el contrario, lo están haciendo para que no salgas adelante (esto también puede ser de forma subconsciente aunque en ocasiones se registra de manera más consiente).Por ejemplo, algo muy común entre amigos o incluso con tu pareja, si tienes unos kilitos de más, al decirle que vas a dejar de comer ciertos alimentos o que vas a hacer ejercicio, escuchar “¿para qué haces dieta?, la última vez solo estuviste sufriendo” o “pero luego el rebote es peor”, “mejor así ya estamos bien” o quizás “sabes que ni vale la pena el sacrifico, luego ni sirve todo eso”.
Hay una serie que me gusta mucho que se llama The Big Bang Theory en la que en uno de los capítulos Penny decide renunciar a su trabajo como mesera para seguir su sueño de convertirse en actriz, Leonard (su novio) inmediatamente reacciona y dice que la apoya, sin embargo todo el capítulo hace comentarios en los que le contagia la inseguridad e incluso en una escena Penny le comenta por teléfono que tenía razón y que mejor no va a renunciar, Leonard empieza a decirle que qué bueno que recapacitó y era la mejor opción (en realidad era solo una prueba que ella le estaba poniendo para ver si él realmente la apoyaba). Al final cuando hablan él reconoce que sus comentarios eran porque él no se hubiera atrevido a perseguir sus sueños y dejar lo demás. Es curioso cómo Sheldon que pareciera el personaje más rígido, le dice que hizo algo excelente al quemar sus puentes.
Este apagador de sueños en la mayoría de los casos no lo hacen porque No quieran a la persona, o porque no quiera que la otra persona esté mejor, sino que se prende un mecanismo de defensa en su parte subconsciente que dice, “si ella o él baja de peso, estará en una mejor situación que yo y me puede dejar” y hace todo para sabotear a la otra persona, como comer los alimentos que está evitando frente a ella o sacándola de su rutina de ejercicio e incluso vemos lo mismo en el ámbito laboral.
Es necesario que empieces a identificar quiénes son tus apagadores de sueños, y que no te dejes sabotear por ellos, recuerda que el nivel de éxito en tu vida está relacionado con el nivel de éxito de la gente que está alrededor de ti.
Empieza a buscar a personas que crean en ti y escúchalas, busca gente que te anime y a la que tu animes a alcanzar sus sueños, sin importar que tan grandes o pequeños sean, así crean un circulo que los motiva a seguir adelante, identifica gente que está alcanzando metas que tú quieres alcanzar y revisa que hicieron para lograrlas.
No digo que quites completamente de tu vida a estos apagadores de sueños, simplemente que sepas por qué lo hacen y quizás tú los puedas ayudar a llegar a un siguiente nivel.
Yo luché con esos apagadores de sueños, en su momento tuve que tomar distancia con ellos y hoy los veo con mucho cariño y son parte de mi vida.