¿Cuántas veces has sentido que no sabes a qué viniste a este mundo?
¿Cuántas veces has sentido que no tienes algo para qué levantarte en las mañanas?
¿O que no estás haciendo lo que deberías de hacer?
Muchos quieren buscar su propósito afuera, en lugar de verse a sí mismos. Y en realidad, tu propósito está dentro de ti.
Si no vives tu pasión, vives reaccionando a lo que la vida te manda, en lugar de accionar lo que quieres en tu vida.
Pregúntate, ¿Cómo quieres vivir? ¿Qué quieres vivir?
No se trata de vivir a la deriva con algo que no te apasiona.
¿Te has preguntado si es posible vivir de tu propósito?
Esto es posible, pero depende de ti. Depende de lo que haces, de lo que vives, depende de cómo lo vives y de qué y cómo es lo que quieres sentir cada día.
¿Cómo encuentras tu propósito?
Respóndete las preguntas:
- ¿Qué amas hacer? ¿Qué disfrutas hacer?
- ¿Qué sientes que otras personas te podrían pagar por hacer?
Es importante alinear lo que amas hacer con algo que podrían pagarte por hacer. Y que además tienes habilidad. Alinear pasión con talento.
Tus valores son una pieza clave de quién eres.
Cuando vives tu propósito, te expandes y vives en abundancia.
Es necesario unir lo que disfrutas con tus talentos y tus valores.
Es aquí en donde se encuentra tu propósito y lo puedes convertir en lo que haces cada día.
Esto depende de tu creatividad, de lo abierto que estés y de lo que estés listo para hacer.
Olvídate del miedo a fracasar y lánzate a vivir tu propósito.
El mundo necesita de más gente que se atreve a vivir así.
Nadie más puede hacerlo por ti. Tú tienes que estar dispuesto a vivirlo.
¿Cómo sería tu vida si ayudaras a otros a vivir su propósito?
