Detrás de los atletas
En época de Olimpiadas hay quienes hablan bien de los atletas pero hay quienes no.
Critican a los mejores exponentes de un deporte. Critican su desempeño, alimentándose de lo que los atletas están haciendo mal.
Cuando esas personas critican a los atletas, a los mejores del mundo, ¿serán ellas las mejor en su trabajo o profesión?
Hablan mal de una persona que está dando su máximo esfuerzo, que entrena diario, que tiene un régimen de alimentación estricto.
Qué lugar tan vacío tienen dentro de ellos para llenarlo por medio de la crítica.
Critican a los que están dándolo todo.
Es una falta empatía y de voltearse a ver a sí mismos, de autocrítica. De preguntarse, ¿y yo cómo estoy en mi vida?
Todas las personas que asisten a competencias, son dignas de admirarse, pues no importa en el lugar en el que queden, el hecho de estar ahí y haber sido seleccionados, es un gran logro.
Cuando ganan, realmente no gana el país, gana el atleta, pues ellos son los que entrenan.
Hace unos años fueron unas personas al aeropuerto a abuchear a deportistas porque no habían ganado.
Es triste que en lugar de convertirnos en una sociedad que toma acción nos convertamos en críticos de otros.
Es más fácil para ellos sacar la frustración y coraje de lo que no logran desde un lugar de incógnito como son las redes sociales.
Si crees que no has tenido las oportunidades que los atletas para llegar a donde están, ¿qué oportunidades estás creando para ser el mejor en lo que haces? Para convertirte en tu mejor versión en cada una de las áreas.
¿Qué haces cada día para ser tu mejor versión?
Es increíble cuando en las competencias se cree que se ha llegado al récord y nadie más lo va a poder sobrepasar y de pronto, llega otra persona y demuestra qué sí es posible.
Se rompe una barrera mental.
Eso no sólo es posible en las Olimpiadas, sino también en la vida.
Todos tenemos barreras mentales de nuestros resultados y podemos romperlas. Es cuestión de querer y creer.
¿Dónde está tu techo? ¿Hasta dónde llegas?
¿Qué estás dispuesto a hacer?
Si estás dispuesto a hacer lo necesario para romper tu marca personal, vas a seguir creciendo y podrás ir a tu siguiente nivel.
¿Qué pasa si decides hacer tus propias Olimpiadas, las de tu vida?
Impresiónate a ti mismo y date cuenta de todo lo que eres capaz.