Enfócate
Una de las claves para llevar a cabo cualquier tarea es enfocarse.
Como dice Lewis Carroll: “Si no sabes a dónde vas, cualquier camino es
bueno”.
Para eso, es importante tener claro nuestro propósito.
Así que el primer paso es tener claridad.
Teniendo claridad, fijamos objetivos para llevar a cabo.
Comenzamos enfocándonos y poniendo todos nuestros sentidos y atención
en ese primer objetivo.
Para no perder nuestro foco, es importante tomar en cuenta lo que vamos a
lograr al realizarlo.
Esto nos ayudará a saber siempre a dónde vamos y a mantenernos
motivados.
Cuando te motivas, la misma emoción te impulsa a seguir accionándote.
Es muy importante mantener siempre el motor que nos impulsa a seguir
adelante.
Busca siempre qué es lo que lo mantiene encendido para que no lo dejes
apagar.
Para poder enfocarte mejor, antes de comenzar con tus proyectos del día,
puedes hacer el siguiente ejercicio:
- Cierra los ojos.
- Haz 3 respiraciones profundas.
- Relájate.
Esta simple técnica te ayudará a estar en el momento presente y a que tu
atención sea plena.
Las cosas no suceden por arte de magia, tenemos que poner de nuestra
parte y hacer uso de técnicas para lograr lo que queremos.
Es importante que cada cierto tiempo te tomes descansos.
De esta manera podrás recargarte un poco y tomar un respiro.
Tú eres la única persona que conoce qué es lo mejor para ti y para poder
trabajar y avanzar de la mejor manera.