¿Cuántas veces te ha pasado que tomas un curso, lees un libro o escuchas alguna conferencia, que te inspira, motiva o te enseña algo, pero después de un tiempo nada cambia?
No es que el curso o el libro no sirvan, sino más bien lo que quisieras transformar sólo se queda en un deseo y en realidad no haces nada para cambiarlo.
Cuando te inspiras, tu mente piensa en todos los cambios que puede haber en tu vida. Después tu mente imagina cómo sería eso. Para el cerebro toda la información que le mandas es real y cierta.
Si te quedas en el mundo de las ideas, tu cerebro piensa que por sólo estarlo soñando ya lo estás viviendo y solamente estás entreteniendo a la mente.
Una vez que sueñas lo que quieres que pase en tu vida, lo siguiente es saber en quién te necesitas convertir hoy para vivir esa vida.
La persona que eres en este momento y lo que estás soñando con vivir es muy diferente, hay un espacio muy grande. Pues la persona que quieres ser piensa y actúa diferente.
Necesitas elevar tu frecuencia y tus acciones, cambiar la forma en la que piensas, sientes y actúas, de esta forma empezarás a vivir esa vida.
Cuando estás en una vibración baja es importante cuidar lo que ves, lo que escuchas y lo que dices.
Observa cómo te relacionas con los demás.
Hay quienes están esperando que cambie lo de afuera para tener mejores resultados en sus vidas.
La realidad es que tu mundo interior genera tu mundo exterior.
¿Qué tipo de vida estás buscando vivir para conectar contigo?
Cuando te das cuenta que hay una vida mejor para ti y no tomas el control para llevarla a cabo, puedes sentir frustración.
Pregúntate: ¿Cómo es la persona que quieres ser? De esa forma es como debes de empezar a comportarte.
Toma el control de tu vida y cambia de frecuencia.
Cuando cambias un área de tu vida, comienza a cambiar todo lo demás.
Recuerda esta frase: “Nada ha cambiado, sólo yo he cambiado, por lo tanto todo ha cambiado”.
¿Qué estás dispuesto a hacer para vivir la vida que quieres vivir?
